A Justin Bieber le gusta el riesgo. Esa es la conclusión que hemos sacado después de conocer las últimas aventuras del canadiense.
Parece ser que las tierras neozelandesas despiertan sus ansias aventureras, ya que Justin hace unos días se atrevió a tirarse de cabeza (con cuerda, claro está) desde una plataforma a 40 metros del suelo.
Pero no contento con saltar una vez, Justin repitió el salto y gritó hasta quedarse sin aire en los pulmones. Seguro que liberó un montón de energía y estrés, ya que su gira por Oceanía le está causando muchísimos dolores de cabeza...
Por cierto, hablando de deportes de riesgo, seguro que es menos peligroso para Justin saltar de una plataforma que enfrentarse a una legión de fans enloquecidas...
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